Gratitud

          

En cuanto a mí, siempre proclamaré lo que Dios ha hecho;
    cantaré alabanzas al Dios de Jacob.
¹⁰ Pues Dios dice: «Quebraré la fuerza de los malvados,
    pero aumentaré el poder de los justos”. Salmos 75:9-10

Comenzamos con el salmo y vemos la respuesta al salmo anterior, y  un corazón agradecido por la obra de Dios, por su cercanía, por revelar su nombre de diferentes formas, es importante tener un corazón agradecido para con Dios y esto me lleva a tener gratitud en cada aspecto de mi vida. La gratitud es algo que no disfrutamos naturalmente, solo se obtiene por medio de una relación personal con El Señor.

Termina el salmo  con un desafío personal, En cuanto a mí, siempre proclamaré. La idea de proclamar es compartir, hacer notorio, no callar todo lo que Dios hizo y hacer, en el caso del salmista el recuerda todas las proezas hechas por Dios a favor de su pueblo cuando lo libero de Egipto y esto lo lleva a cantar alabanzas a Dios.

Vamos mirando el contexto de vida que nos toca a nosotros y podemos con toda libertad recordar de donde nos sacó Dios y donde estamos hoy, en medio de ese camino hay muchas cosas que  Dios manifestó, su provisión, su protección, su poder y aun su paternidad para con nosotros. Pero es lamentable que el ser humano en muchas oportunidades se olvida de lo que Dios hizo y se acostumbra a vivir una vida de milagros. La única forma de tener gratitud es cuando la llenura del Espíritu es real en mi vida, si Dios me controla, el resultado será gratitud y alabanza a mi Dios.

Termina diciendo aumentaré el poder de los justos.

Justos: somos todos aquellos a quienes Dios justifico por su gracia y el poder ya es nuestro, no pasa por la cantidad que recibimos, sino por cómo nos rendimos ante El y dejamos que actué por medio nuestro. El apóstol Pablo dice en Filipenses 1:6 frutos de justicia por medio de Jesucristo.

Para pensar: Puede hoy tomar un tiempo para recordar todo lo que Dios hizo y hace en su vida, pedirle que Él le controle y de esta manera tendrá el deseo de salir y proclamar las grandes cosas que Dios hace en cada momento.

La gratitud es una actitud que nace de un corazón en sintonía con Dios.