¿Tiene quejas para con Dios?

Oh Dios, ¿por qué nos has rechazado tanto tiempo?
    ¿Por qué es tan intensa tu ira contra las ovejas de tu propia manada? Salmo 74:1

Esta es la situación que vive el Salmista, habla del abandono de Dios, presenta quejas, se da cuenta que no hay profeta  y no puede ver en la actualidad todas las señales que Dios hizo y pude hacer, esto trajo a su vida un tiempo de depresión y olvidándose de Dios se enfoca en su misma persona.

Cuando estamos en momentos difíciles, es muy común tener un corazón lleno de dudas y esto trae ingratitud e incertidumbre, no miramos para atrás para ver lo que Dios hizo, solo pensamos que estamos siendo castigados por el mismo Dios quien nos ama incondicionalmente. Sabemos todo lo que Dios es capaz de hacer, pero la mente queda turbada y no podemos pensar con claridad.

¿Le paso esto alguna vez?

No tengo duda que esta es su realidad, en más de una oportunidad siente que Dios le castiga y le atribuye la culpa a su mal comportamiento o a la falta de aceptación por parte de Dios, se siente rechazado por personas que le defraudan continuamente. Esta actitud es normal en momentos donde estamos siendo probados y pensamos que es algo que solo a nosotros nos pasa, lo primero que tenemos que recordar es que lo mismo que me está pasando , lo sufren todos los cristianos alrededor del mundo, en algunos momentos Dios nos prueba para que nuestra fe sea firme y constante.

Vemos al salmista en una actitud de queja hasta que entra en razón y se da cuenta quien es Dios y todo lo que hizo.

Para pensar: En los momentos difíciles lo único que podemos hacer es NADA, suena ilógico, pero es una realidad, Dios se ocupa de nosotros, mucho mejor de lo que imaginamos o soñamos, Vengan a mi todos los trabajados y Yo los hare descansar y al poner todas las carga en El, llegamos a disfrutar la paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento. No se preocupe, si tiene quejas deje que Dios las sepa en definitiva él está en nuestra vida, nos conoce, nos comprende y  no tengo ninguna duda que nos consolara.

Rp