¿PORQUÉ LOS PERDIDOS PERECEN ?

A la luz del primer punto, parece razonable preguntar por qué el apóstol Pablo diría en 2 Tesalonicenses 2.10 concerniente a los perdidos: “los que se pierden, por cuanto  no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. “Los calvinistas nos harían creer que este rechazo es involuntario e inevitable. Sin embargo, lo que es involuntario  e inevitable no puede ser rechazado. Por definición, algo rechazado debe serlo voluntariamente y no inevitablemente. Las Escrituras usan el lenguaje de la responsabilidad y de la culpabilidad. Dios quiere que la persona sepa lo que debe hacer para nacer de nuevo (creer), y eso es opuesto a que lo haría porque es un nacido de nuevo. El bien conocido pastor calvinista y escritor, Dr. D. James Kennedy parece conceder este mismo punto. En su libro, “Por qué yo creo”, en un capítulo acentuando la necesidad del nuevo nacimiento, dice: “Tenemos un imperativo, eso es cierto, pero contiene en sí mismo el germen de una promesa.  Porque si es cierto que debemos nacer de nuevo, entonces también es cierto que podríamos ser nacidos de nuevo Podemos ser perdonados. Podemos ser recreados Podemos tener nuevo corazón, nuevos afectos, nueva vida, nuevo poder, nuevo propósito, nueva dirección, nuevo destino. Sí, podemos ser nacidos de nuevo. Mis amigos, eso es las buenas nuevas.” El Dr. Kennedy hasta parece conceder que la fe viene primero y que resulta en regeneración, cuando él dice a sus lectores: “Coloca tu confianza en Cristo. Pídele venir y nacer en ti hoy.” De modo que, el calvinismo tiene el carruaje de su teología delante de su caballo bíblico .Así que aceptar el primer punto del calvinismo es rechazar una razonable interpretación de Juan 3:16 como así también otras porciones de la Escritura.